
Dos palomas al viento
se posan en tus labios,
suaves ondulaciones
emergentes sobresalen.
Sinuosas y volcanicas
deseosas y apasionadas,
posa tus manos en ellas,
dales calor ... abrázalas.
Avidas de carińo
desplegando sus alas,
ofreciendose temblorosas
de tus dedos son esclavas.
Ofréceles el calor,
dales a beber el agua,
que emana de tu boca
no pares ... continua.
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